Sin soltarse de la mano de su madre, los hijos de Angelina Jolie acudieron con esta a una de las tiendas en Park City, en Sherman Oaks, para elegir todo lo necesario para pasar una noche “de miedo”. Con un sencillo vestido negro, la artista fue una vez más el centro de todas las miradas mientras volvía con sus niños a casa, aunque en esta ocasión sólo le acompañaron los tres pequeños. Shiloh, de seis años, y los mellizos Vivienne y Knox, de tres, fueron los encargados de elegir elementos decorativos con los que transformar su hogar que, según se ha dicho, estará lleno de calabazas.
Shiloh con un conjunto de pantalón y camisa negros, imitando una vez más el estilo masculino de sus hermanos mayores, llevaba además colgadas al cuello unas modernas gafas de sol. De negro también sus hermanos, aunque Vivienne rompía esta monocrommía con unicornio rosa que cargaba a modo de mochila, ¿será ese su disfraz? Knox por su parte parece que escogió de todo lo que había en la tienda un cocodrilo, que llevaba agarrado de una pata mientras se subía al coche. El solícito guardaespaldas fue quien cargó con el resto de las bolsas.
Este año sin duda en casa de los Pitt-Jolie se vive un ambiente de fantasía y es que Angelina rueda la nueva versión del clásico de la Bella Durmiente, Maléfica. De hecho tres de sus retoños debutarán con ella en esta cinta, siguiendo así la estela artística de la familia. Pax, Zahara y Vivienne, como la joven princesa Aurora, se pondrán delante de la cámara para dar vida a esta mágica historia. Quién sabe si les picará el gusanillo de la interpretación y decidan seguir esta carrera.
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